No puedo ni recoredar el momento como comenzó, como se dio el placer de tu presencia en mi vida, haciendo crecer esta necesidad de ti en mi existencia, cada momento cada instante lo haces único, pones cada tentación en mis sentidos, cada deseo en mi de ti.
En cada mirada pones tu propio sello, en mis ojos pones tu silueta, tu sonrisa, plasmas tu deseo, me haces desear cada curva de tu cuerpo, cada contorno de tu ser, cada detalle entran por mis ojos y me hace sentirte mas cerca en cada momento, en cada deseo recuerdo la visión de tu piel.
Un te amo, un te extraño, un te deseo, soy tuya, me haces falta, te adoro, mis oídos extacias con cada palabra, con cada expresión de tu amor, muchas veces escucho tu voz donde no esta, el pensamiento juega con mi realidad te escucho y no estas, tu melodiosa voz me hace falta desde que despierto hasta que vuelvo a dormir.
Mis manos toman vida en el mar de tu piel, se hacen al calor de tus contornos, se mueven con vida propia, la piel se me eriza solo de pensar esas caricias que tu piel me invocan, esa ncescesidad de tomar tomar tu cuerpo en mis manos y pegarme al calor que tu cuerpo emana.
El sabor de tu piel en mi paladar ha llegado a extaciarme aun en los momentos que no estas conmigo, se hace cada momento mas fuerte el sabor de tu piel, una delicia, tan delicada satisfacción, tan exquisito sabor, una y mil veces me aloca tu sabor a niña-mujer, ese banquete tan intimo.
Tu aroma candido y virginal, mmmm la delicia de tu perfume, me contagias pasión, deseo, lujuria, sentimientos mezclados con las hormonas que tu piel que llegar hasta mi olfato, llevándome al cielo, transportándome a la necesidad de sentir tu aroma, su esencia, esas hormonas que me alocan, crean mis locuras de media noche.
